Capítulo 430
Los hombres se lanzaron a golpear a Eva, dejando a Luna sin protección. Dafne corrió hacia Luna y la sostuvo con cuidado.
-Srta. Seballos, despierte, soy Dafne.
Con los hombres distraídos, Dafne ayudó a Luna a caminar hacia el carro.
-Srta. Seballos, aguante un poco, la llevaré al hospital.
Mientras tanto, los hombres atacaban con furia.
Sin embargo, la habilidad de Eva era mucho más de lo que ellos podían imaginar.
Vestida con un ajustado traje negro, Eva tenía una mirada afilada como un águila y se movía con la agilidad de un leopardo en la noche. Se deslizaba entre ellos, derribando a uno tras otro con movimientos rápidos y precisos.
Con un potente golpe de codo, hizo tambalearse a un hombre de cabeza rapada, quien cayó al suelo. Luego, con una impresionante patada giratoria, golpeó a un corpulento hombre en la cara, dejándolo con un moretón y sangrando por la nariz.
Un hombre con tatuajes en el brazo, lleno de ira, arremetió con violencia contra Eva.
Eva utilizó su fuerza en contra de él, neutralizando su ataque, y con una perfecta llave lo derribó de espaldas sobre el pavimento.
Todo esto sucedió en menos de diez minutos. Los hombres, ahora derrotados, yacían en el suelo, quejándose de dolor, incapaces de levantarse.
Eva los miró con frialdad, sin mostrar piedad alguna.
Con su habilidad, Eva había derribado a los seis hombres sin recibir ni un rasguño.
Dafne, previamente, ya había llamado a la policía.
En ese momento, los oficiales llegaron.
Dos policías observaron a los hombres en el suelo con expresiones de sorpresa.
Uno de ellos, incrédulo, miró a Eva.
-¿Dices que tú sola los derrotaste a todos?
Eva asintió sin inmutarse.
Dafne intervino en el momento adecuado.
-Oficiales, ellos fueron los que atacaron primero. Esto fue en defensa propia, además eran muchos contra nosotras. Si no fuera porque mi amiga sabe defenderse, no habríamos escapado.
Dafne continuó con seriedad.
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Capitulo 430
-Oficiales, mi amiga no está borracha, la drogaron. Tengo motivos para creer que estos hombres intentaron agredirla. Quiero llevarla al hospital para un examen. Pueden enviar a alguien con nosotras, el informe médico será la prueba más contundente.
Los policías intercambiaron miradas.
Uno de ellos dijo:
-Señora, lleve a su amiga al hospital. Mi compañero las acompañará, mientras que la otra señora vendrá conmigo a la comisaría.
Dafne llevó a Luna al hospital.
Eva fue con la policía a la estación para dar su declaración.
El informe médico estuvo listo al día siguiente.
Luna seguía inconsciente en la cama del hospital.
El médico, con el informe en mano, se acercó a Dafne y a los policías para explicar la situación de Luna.
El informe contenía términos médicos complicados, por lo que el médico decidió explicarlo de manera sencilla:
-La paciente fue drogada con una sustancia que inhibe el sistema nervioso y aumenta los deseos internos.
Con esa explicación, Dafne y los policías entendieron la gravedad de la situación.
Luna efectivamente había sido drogada.
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