Capítulo 648
Capítulo 648
Una vez dentro del coche, Luciana habló de manera inusual
-¿Puedo hacerte una pregunta?
-Claro, lo que quieras -asintió Alejandro, curioso.
-¿Cuántos días tarda, por lo general, una transferencia a una cuenta en el extranjero?
Él, acostumbrado a estos trámites por su trabajo, contestó de inmediato:
–Entre tres y cinco días, por lo general. Aunque si llegas a los siete días y no se refleja, tienes que investigar. – Frunció el ceño. ¿Por qué lo preguntas?
Luciana negó con la cabeza.
-Nada importante, solo quería saber.
Pero internamente estaba haciendo sus cálculos. Si era de tres a cinco días y ya habían pasado cuatro desde que hizo el envío, ¿por qué no había recibido ninguna noticia del “distorsionador de voz“? Quizá debía seguir esperando… No tenía otra opción.
–
Cuando llegaron a la consulta de ginecología y obstetricia, había una serie de chequeos por hacer. Alejandro llevó a Luciana hasta la sala de espera.
-Siéntate. Enseguida regreso.
-Gracias.
Ella sabía que necesitaba tener la vejiga llena para uno de los exámenes, así que ya se había tomado una botella de agua, aunque todavía sentía que no era suficiente. Sin decir más, Alejandro fue a comprar otra.
Luciana esperaba, sentada, cuando su teléfono sonó. Al ver en la pantalla que el número estaba oculto, abrió los ojos desmesuradamente. ¡Era él, el de la voz distorsionada! Deslizó rápido para contestar, hablando en susurros:
-¿Sí? ¿Eres tú?
-Así es.
El corazón de Luciana se aceleró.
–¡Te envié el dinero hace días!
-Tranquila. La voz sonaba impasible-. Justo me llegó. Por eso te estoy llamando.
-¿Y bien? -replicó, impaciente-. ¿Me darás la información?
-Te enviaré todo por correo electrónico. Revísalo ahí,
– ¿No estarás jugando conmigo?
Qué tontería -se rió con ironía-. Si solo quisiera burlarme de ti, ni te llamaría de nuevo.
De repente, el interlocutor guardó silencio.
-¿Pasa algo?-preguntó Luciana, confundida.
-Vaya, vaya… Estás con él. ¿Te acompaña a tus revisiones prenatales?
-¿Qué…? —Luciana se puso de pie, mirando alrededor con nerviosismo-. ¿Dónde estás? ¿Cómo sabes…?
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Capitulo 648
+25 BONUS
Era obvio que la estaban observando en ese mismo instante ¿Acaso ese tipo veía a Alejandro con ella?
-No te molestes en buscarme -comentó con tranquilidad. No me encontrarás. Y no pienso decirte quién soy.
Luego, en tono burlón, agregó:
-Señora Guzmán… en fin, no te quito más tiempo. Felicidades, por cierto.
-¡Oye…! ¡Oye! -exclamó Luciana, llena de preguntas. Pero el hombre ya había colgado.
En ese preciso instante, Alejandro regresaba con una botella de agua y, al verla tan alterada, la sujetó del brazo:
-¿Qué pasa? ¿Te sientes mal? ¿Quién te llamó?
Luciana, todavía conmocionada, tenía en la mente esas dos palabras que la habían dejado perpleja: “señora Guzmán.” Aquel desconocido no solo la espiaba, sino que también sabía que la relacionaban con Alejandro. ¿Quién demonios era? ¿Y eso de “felicidades” qué significaba?
Sumida en la confusión, Luciana apenas logró balbucear algo, sin atinar a responder. Mientras tanto, Alejandro la miraba con creciente preocupación.
Capitulo 649
