Capítulo 158
Cecilia estaba cada vez más convencida de que Iván era el hombre perfecto para Adriana y sus ojos brillaban con entusiasmo.
“Sí, también crees que soy perfecto para ella, ¿verdad? Pero ella aún no se ha divorciado.” Comentó con resignación.
Últimamente, Iván había notado que algo no andaba bien con sus sentimientos hacia Adriana; cada vez que la veía, su corazón latía con fuerza y deseaba estar cerca de ella, cuando no la veía, pensaba en ella. ¿Eso no era amor?
Después de entender sus sentimientos, decidió que no podía dejar que su relación de amistad con Adriana lo detuviera, debía ser valiente y buscar su felicidad, pero ¿cómo debía hacerlo?
Por eso, llamó a Cecilia, la persona que mejor conocía a Adriana, para que le diera algún consejo.
“Todo es culpa de ese desgraciado de Rodrigo, que no deja libre a Adri, si no, jestaría libre hace tiempo!” Exclamó Cecilia con enojo.
Cada vez que mencionaba a Rodrigo, su ira aumentaba, así que estuvo insultándolo durante diez minutos hasta que su boca se secó y tuvo que beber un gran sorbo de vino.
“Tengo un plan,” dijo, después de dejar su copa y mirar a Iván con ojos brillantes. “Un plan que podría lograr que Rodrigo y Adri se divorcien.”
“¿Qué plan?” Preguntó Iván rápidamente.
Cecilia se acercó y le susurró algo al oído.
Los ojos de Iván brillaron: “Creo que esto podría funcionar, pero necesitamos su aprobación.”
“Sí, Adri tiene un carácter muy terco, la llamaré para preguntarle.” Sin perder tiempo, Cecilia sacó su teléfono y llamó a su amiga, que en ese momento estaba sentada en la cama leyendo un libro.
Cecilia omitió mencionar el interés de Iván y dijo: “Adri, se me ocurrió una estrategia para que Rodrigo se divorcie de ti…”
Adriana escuchó pacientemente, pero al final respondió: “No, no, eso no lo puedo hacer.”
“¡Qué tonta eres!” La reprendió Cecilia, “No puedes pensar siempre en los demás, también debes pensar en ti.”
“Soy consciente de eso, pero no puedo hacerlo, sería demasiado incómodo.”
Cecilia sabía que Adriana era una persona tímida y reconoció que eso sería difícil para ella. Después de pensarlo, agregó: “Lo entiendo, pero piensa en el daño emocional que te causa no divorciarte. ¿Aún crees que no puedes hacerlo? Además, no es algo terrible, solo un pequeño asunto, ¿no crees?”
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Capítulo 158
Adriana reflexionó y se dio cuenta de que Cecilia tenía razón, realmente necesitaba divorciarse de Rodrigo, así que decidió que no estaría de más intentarlo.
“Está bien, lo intentaré,” finalmente accedió. “Me pondré en contacto con Iván.”
Cecilia sonrió y le hizo un gesto de aprobación a Iván.
Después de colgar, le dijo: “Adri te va a llamar, busca un lugar tranquilo para recibir su llamada.” “De acuerdo.” Iván sonrió con confianza y se dirigió al baño con su teléfono.
A la mañana siguiente, Adriana estaba en un centro comercial eligiendo ropa cuando recibió una llamada de Eric.
“Adri, ¿te acuerdas de la familia Vívez?” Le contó al otro lado de la línea. “Mañana es el cumpleaños número ochenta del señor Vívez y van a tener una fiesta en un hotel, ¿puedes ir con Rodrigo?”
Adriana respondió mientras se miraba en el espejo y evaluaba cómo le quedaba un vestido plateado.
