Capítulo 296
Al abrir los ojos, Adriana se encontró sentada en el césped junto a Iván, rodeada por un grupo de personas que la miraban con incredulidad. Para ser más precisos, todos tenían la boca abierta, fijando la vista en su rostro con expresiones de asombro absoluto.
Adriana estaba un poco desconcertada y se llevó la mano a la cara. Al sentir su mejilla, se detuvo de golpe. ¿Dónde estaba su mascarilla?
Pasó las manos por su rostro un par de veces y confirmó que la mascarilla realmente no estaba, por lo que su corazón dio un vuelco.
Había usado mascarilla desde los diez años, así que ya estaba muy acostumbrada, por lo que, estar sin ella al sol sintió como si estuviera desnuda, y al instante, se sintió muy incómoda. De inmediato, sintió una náusea y se llevó la mano al pecho mientras vomitaba un poco de agua.
Iván rápidamente le dio unas palmaditas en la espalda: “¿Te atragantaste con el agua?”
Adriana asintió, e Iván la levantó en sus brazos: “Te llevaré a descansar un poco.”
Dieron unos pasos cuando Rodrigo las detuvo.
“Llamé a emergencias, la ambulancia vendrá pronto para llevar a Adriana al hospital para un chequeo.” Dijo Rodrigo, mirando una piedra en el césped.
Adriana ya tenía una gripe fuerte, y ahora se había caído al agua, lo más probable era que llegase a tener fiebre después. Iván sabía lo que era más importante y no discutió con Rodrigo,
solo asintió.
Iván echó un vistazo a Owen y los demás, quienes seguían mirando a Adriana, aunque sus miradas ya no eran solo de sorpresa; había asombro, envidia y codicia. Frunció el ceño, queriendo encontrar algo para cubrir el rostro de Adriana, pero no había nada a su alrededor, así que simplemente la abrazó un poco más fuerte.
La ambulancia llegó rápidamente, e Iván subió con Adriana. Owen, siendo el responsable del equipo, también subió, Fabiana, siendo la jefa de Paola, la “causante del accidente,” naturalmente tenía que ir también. Por supuesto, Rodrigo también subió.
Desde cualquier punto de vista, no había razón para que Rodrigo no subiera, así que nadie objetó su acción. Sin embargo, recordando el rostro de Adriana y su pasado con Rodrigo, la gente comenzó a murmurar a sus espaldas.
La ambulancia avanzó rápidamente, y mientras el entorno se calmaba, Owen exclamó junto a Adriana: “¡Guao, eres muy guapa! ¿No estabas desfigurada? ¿Te recuperaste?”
“Si,” Adriana tocó suavemente sus mejillas y sonrió, “Antes tenía dos cicatrices horribles aquí,
hechas con un cuchillo.”
Owen hizo un sonido de sorpresa y maldijo al que le había hecho eso a Adriana, luego la observó un rato más y dijo emocionado: “¡Adri, no deberías ser guionista, deberías salir a la luz y ser una actriz! Con esa belleza, serías de las más destacadas en el mundo del espectáculo.
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Capitulo 296
¡Seguramente serías un éxito!”
“No, no, no puedo ser actriz. Prefiero seguir detrás de escena.”
Owen se rio a carcajadas y preguntó: “Si ya te recuperaste, ¿por qué sigues usando mascarilla todos los días?”
Por instinto, Adriana volvió a tocarse la cara: “Ya es costumbre, por eso la sigo usando.”
Owen bromeó: “¿Tienes miedo de que si te quitas la mascarilla, demasiada gente te perseguirá? Con esa cara, seguro que la fila de pretendientes llegaría hasta Solara.”
Owen solo estaba bromeando, pero Adriana se sintió un poco incómoda.
El espacio en la ambulancia era muy reducido; además de los médicos y enfermeras, había varias personas sentadas, así que no había mucho espacio libre. A su izquierda estaba Iván, a su derecha Owen y justo en frente, estaba Rodrigo. Las piernas de este último eran largas, por lo que sus rodillas casi se tocaban. Adriana debía tener cuidado de no tocar a Rodrigo al mover las suyas.
