Capítulo 423
Rodrigo normalmente ignoraba estas notificaciones, ni siquiera les daba una mirada, pero esta vez, por pura casualidad, captó las palabras “AdriPluma” y de inmediato, hizo clic para ver de qué se trataba.
Unos minutos después, sentado en el sofá, el rostro de Rodrigo se oscureció gradualmente, sus cejas se fruncieron con fuerza y parecía muy disgustado.
Después de una gran pelea con Cecilia, Rubén, quien se había mudado a casa de Rodrigo, salió del baño con una bata blanca, secándose el cabello y preguntando. “¿Qué pasa? ¿Quién te ha hecho molestar?”
Rodrigo no respondió, sus dedos se movían rápidamente por la pantalla de su teléfono hasta que se detuvieron en una página, donde sus ojos se fijaron en la pantalla con intensidad, mientras su expresión se volvía aún más sombría.
La curiosidad de Rubén no tenía límites; aunque Rodrigo tenía mal genio, era del tipo que no solía mostrar sus emociones. ¿Qué podría haberlo enfurecido tanto?
Rubén se acercó a él, echó un vistazo a la pantalla del teléfono de Rodrigo y vio un comentario: “¡AdriPluma e Iván son la pareja perfecta! Él es guapo, ella hermosa, una es guionista y el otro una estrella, además son amigos de toda la vida, ¡son compatibles en todos los sentidos! ¡Deberían casarse ya!”
Rubén soltó una carcajada, dándole una palmada en el hombro a Rodrigo.
“¿Te estás molestando por algo así? ¿Por qué te tomas en serio lo que dice la gente en línea? La gente siempre dice tonterías en internet. Rodrigo, hemos crecido juntos, te conozco desde hace mucho tiempo, pero nunca pensé que podrías ser tan infantil.”
Rodrigo apartó su mano y le preguntó fríamente: “¿Cuándo vas a volver a casa?”
Rubén respondió con resignación. “¡Vaya, te has enfadado! ¿No se puede decir nada? Bueno, me callaré, ¿vale?”
Rodrigo siguió desplazándose hacia abajo, notando que los comentarios elogiaban a Adriana e Iván como una pareja perfecta, por lo que su ira siguió creciendo. Finalmente, no pudo soportarlo más y llamó a César para que eliminara esas cuentas con comentarios destacados. Escuchando a un lado, Rubén no podía parar de reír.
“¿Por qué eres tan poco tolerante? ¿No pueden escribir unas palabras? ¡Me haces reír tanto!”
Ese asunto se extendió durante dos días en línea, luego se calmó gradualmente. Sin embargo, a diferencia de antes, ya nadie se burlaba de la apariencia de Adriana; ahora todos la elogiaban por su belleza, y Adriana e Iván ganaron nuevos seguidores como pareja.
Esa tarde, Adriana recibió una llamada de Vicente Noriega, quien la invitó a cenar en su casa. Adriana pensó un momento y aceptó.
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Capitulo 423
Sabía que Bárbara había sido liberada por Vicente, probablemente debido a eso, su padre se sentia un poco culpable, por lo que la invitó a cenar.
Sin embargo, a Adriana no le importaba mucho ese asunto, estaba a punto de irse a Frescura y no podia preocuparse por la familia Noriega por el momento. ¿Y si ocurría una emergencia mientras ella no estaba? Eso era lo único que la preocupaba.
Después de pensarlo, decidió que no importaba, ya que Frescura y Solara estaban bastante cerca, a solo una o dos horas en avión, mientras no ocurriera nada urgente durante sus días de parto, podria regresar a tiempo.
Con eso en mente, se preparó y fue a la casa de la familia Noriega. Al entrar en la sala de estar, vio a Vicente de pie frente al sofá, hablando con la empleada.
Camila y Bárbara estaban sentadas tranquilamente a un lado. Aunque no dijeron nada, sus ojos destilaban un odio evidente hacia Adriana, mostrando con claridad que la odiaban profundamente.
Adriana había roto completamente con Camila y Bárbara, y dado lo que esta última le había hecho, aunque no iba a causar un escándalo, tampoco iba a fingir una relación amistosa frente a Vicente.
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