Capitulo 19
Ahora, cada vez que vela a David y Lama, sentia un rechazo desde sus entrañas, y no quería seguir disgustándome a
mi misma.
David sabia que lo que había hecho ayer estaba mal, asf que se vela tan enfadado como antes.
-Esmeralda, sé que ayer me equivoqué en algumas cosas, pero mira, al final no te pasó nada. Ya sabes que Luna siempre ha sido débil desde pequeña; si no la hubiéramos llevado al hospital de inmediato, quién sabe qué habría pasado.
Hizo una pausa antes de continuar
sque
-Ayer ya dejé muy claro delante de todos que entre lama y yo no puede haber nada. Mi esposa siempre serás tú, así que deja de hacer escándalos, ¿st?
Con un tono algo condescendiente, añadió:
La situación de Luna ayer era muy urgente. Sé una buena esposa y deja que Rashid te lleve a casa.
Luego, se dio la vuelta y se fue, sin darle oportunidad a Esmeralda de decir algo más.
Al verlo alejarse con tanta prisa, preocupado por otra mujer Esmeralda se molestó.
-Mira cómo el tipo que hace un momento era tan posesivo conmigo ahora corre tan rápido por su querida amante. Y aún tiene el descaro de decir que no hay nada entre ellos.
A decir la verdad, Esmeralda querfa un divorcio en buenos términos y digno. Pero esta actitud de David, pretendiendo ser afectuoso mientras era egoista e hipócrita, la hacia querer venganza.
Cuando pudo ignorar el tema, miró al profesor Neviani, que estaba a su lado, y le sonrió:
Qué pena, seguro que todo esto le parece chistoso.
El profesor Neviani la observó un momento, algo dudoso, antes de decir:
-Si necesitas un abogado, puedo recomendarte uno. Tengo un contacto muy conocido por su experiencia en casos de divorcio.
-Perfecto. Le agradeceré mucho que me ayude con eso, profesor Neviani.
-No necesitas ser tan formal conmigo. Si no fuera porque me presentaste a nuestro tutor, nunca habría podido entrar al instituto de investigación tan fácilmente.
Al escuchar sus palabras, Esmeralda recordó cómo, en el pasado, ella era la alumna favorita de los profesores, con una vida llena de éxitos y disfrutando de todo lo que hacía. Mientras tanto, él era un estudiante humilde que luchaba con dificultades económicas.
Pero ahora, él era un profesor prestigioso y reconocido, mientras la vida de ella estaba hecha pedazos, sin ser nada ni nadie. Este contraste la hizo reflexionar.
El profesor Neviani añadió, con una sonrisa:
De ahora en adelante, no me digas “profesor Neviani“. Liamame por favor Armando, tan solo mi nombre de pila está bien
Esmeralda lo miró con una sonrisa:
-Pero, según las reglas, debería decirte “profesor Neviani, así como en la universidad.
Cophoto 19
+25 BONUS
Si no hubiera dejado sus estudios por amor, probablemente ahora estaría triunfando en su campo.
Desde pequeña, por influencia de su abuela, que trabajaba en la industria farmacéutica, Esmeralda habia desarrollado un gran interès por el mundo de la medicina. Sin embargo, por miedo a que su hermano creyera que queria competir con él, no solo evité elegir finanzas como carrera, sino que también descartó la biotecnología.
Aun así, su pasión por el área médica la llevó a estudiar un nuevo campo interdisciplinario: la biofísica. Esperaba que en el futuro ella pudiese trabajar en inteligencia artificial médica, contribuyendo al ámbito que tanto le gustaba y apasionaba.
Durante sus estudios, llegó a amar profundamente la biofisica, y pensó que dedicaría toda su vida a ella. Pero nunca imaginó que abandonaría la carrera que tanto amaba por un hombre, solo para acompañarlo a construir su negocio.
Y ahora, mientras él era el intocable señor Vaillant, ella era ana mujer abandonada, despreciada incluso por pedir una indemnización por el divorcio.
-Si tú no te valoras, nadie te va a valorar.
Armando sonrid:
Tienes razón. Pero se siente extraño, ya no eres una alumna. ¿Qué tal si tú me llamas Armando y yo te llamo Esmeralda?
A Esmeralda le pareció un poco inapropiado. Aunque se conocían, no eran tan cercanos. Si no fuera porque la había salvado ayer, prácticamente no hubieran tenido ningún contacto en estos años. Ella sonrió y respondió:
-Mejor sigo llamándote “profesor Neviani“.
Vamos a visitar al profe.
Armando no insistió más y respondió con una sonrisa.
Cuando estaban a punto de irse, llegó Rashid, el asistente de David. Al ver que Esmeralda iba a marcharse con el profesor Neviani, les dijo con seriedad:
-Señora Vaillant, el señor Vaillant me pidió que la lleve a casa. Por favor, apresúrese y no me haga perder el tiempo. Tengo muchas cosas que hacer.
Con un tono despectivo, añadió:
Ya está casada y sigue sin saber cómo comportarse. No es de extrañar que el señor Vaillant prefiera a la señorita Martel. Se merece todo lo que le ha pasado.
Captulo 20
+25 BOHUS
Capítulo 20