Astes…
Sergio se apresuro a apoyar las palabras de Alejandro
La policía no encontré a narlie dentro del
Porsche.
Ja…
Larisa de Luciana sonó amarga; la tristeza brillaba en su mirada encendida in nadie al volante? ¿Un auto fantasma? ¿El Porsche se estrelló solo?
Luciana…dijo Sergio, tratando de mantener la calma Estoy seguro de que la policía investigará y sabremos qué pasó. Solo demos un poco de tiempo…
¿Más tiempo?-Lo miro con frialdad ¿Para qué? ¿Para que la encubran?
-No es eso… Sergio se quedó sin palabras. 2
-Luciana… murmuró Alejandro.
-Alejandro lo interrumpió ella con una mueca de amargura. Yo misma vi ese Porsche rojo. Sé que es el de Mónica. La matrícula coincide, ¿o no?
-Si–admitió Alejandro con seriedad. El auto es de ella. Pero no estoy encubriéndola. Te repito que el vehículo estaba vacío.
-Entonces, ¿en dónde la escondiste? -insistió Luciana, apretando los dientes-. ¡Dimelo!
-No la oculté. -Alejandro chasqueó la lengua, incapaz de contener su frustración-. La policía ya lo sabe: no encontraron a nadie dentro del coche, pero como el Porsche es suyo, pronto la buscarán para investigarla…
-¡Fernando! -un grito desgarrador sonó de pronto. Venía del vestíbulo.
Se trataba de Victoria y Diego, que llegaban con los ojos empapados de lágrimas. Al fijarse en la puerta del quirófano cerrada, Victoria casi se desvaneció del impacto.
-¡Victoria!
-¡Señora! -exclamó Luciana, soltando a Alejandro para sostenerla.
-Luciana… -Victoria respiró hondo para no perder el conocimiento y le tomó la mano con fuerza-. ¿Qué pasó? ¿ Cómo fue que Fernando terminó así?
-Señora… -Luciana agachó la cabeza con culpa-. Es mi responsabilidad. Por mi culpa…
No sabía exactamente lo ocurrido, pero sin duda Fernando había resultado herido intentando protegerla. -No digas eso–replicó Victoria con voz temblorosa-. ¿Qué “culpa” ni qué nada? Él saldrá de esta, ¿sí? -Sí… -Luciana asintió con dificultad, tragándose un nudo en la garganta. Quería creerlo con todas sus fuerzas. Minutos después, la policía llegó para tomar la declaración de Luciana. Le pidieron pasar a un consultorio vacío. -Señora le preguntó uno de los agentes-. ¿Confirma que se trataba de Mónica al volante del Porsche?
Sí, oficial —asintió Luciana-. Era su auto y estoy segura de haberla visto allí dentro.
Aunque la visibilidad no era perfecta, reconoció a Mónica a través del cristal. 61
-Está bien, verificaremos la información –respondió el policía, tomando nota-. Firme aquí, por favor.
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Capitulo 778
+25 BONUS
-Claro. Luciana tomó la pluma y rubricó su testimonio,
necesitamos algo más, nos comunicaremos con usted.
-De acuerdo accedió ella, apretando los labios.
Luego de salir del consultorio del médico, Victoria se acercó a Luciana y la tomó de la mano, visiblemente alterada. -Luciana, se llevaron a Fernando a cirugía. ¡Dicen que tienen que hacerle una intervención de urgencia en la cabeza!
Al escucharla, el corazón de Luciana se estremeció.
Tranquila, señora – trató de mantener la cordura-. Por la forma en que lo encontré, seguramente tiene un coágulo. Mientras más pronto se lo extraigan, mejor.
Diego, a un lado, parecía esperar ansioso alguna respuesta. Luciana cerró los ojos un segundo, sintiendo una opresión en el pecho.
-Señor, dentro de lo grave, al menos Fernando sigue con vida. Eso ya es una buena señal.
Lo menos que podemos hacer es permanecer serenos y darle fuerza para que salga adelante.
-Sí… sí, claro contestó Victoria, con la voz aún temblorosa.
Luciana evitaba pensar en lo peor. Si algo le sucedía a Fernando, ¿cómo afrontarían sus padres semejante tragedia? ¿Y ella misma…?
capitulo/78/