Capítulo 160
Bruno, en su estado actual, no necesariamente se debía a que amara tanto a Dafne. Tal vez simplemente le gustaba actuar, buscando despertar la compasión de Dafne para que ella ablandara su corazón y regresara a su lado.
En cuanto a Macarena, Romeo realmente la despreciaba desde el fondo de su corazón.
Desde el principio, Macarena sabía que Bruno y Dafne estaban juntos, pero se interpuso entre ellos de una manera desvergonzada, sabiendo que era una amante. No podía ser una buena
persona.
Con este pensamiento, Romeo de repente sintió que no era tan difícil hablar.
Romeo le comentó con un tono de voz indiferente: -Debe ser por Dafne, ya sabes, ahora Dafne tiene un prometido y ambos están bastante enamorados. Bruno los vio anoche y se volvió loco de celos. Estuvo caminando solo por mucho tiempo hasta que se desmayó.
-Ay–suspiró Romeo profundamente, mostrando una expresión de gran pesar-. No tienes idea, estuvo a punto de morir de frío. Si no hubiera sido por un transeunte que lo encontró a tiempo y lo llevó al hospital, posiblemente nunca lo hubiéramos vuelto a ver.
Después de hablar, Romeo observó discretamente la expresión de Macarena.
El rostro de Macarena se puso pálido de inmediato.
Ella murmuró: -¿Fue por Dafne?
Romeo suspiró: -Sí, ¿puedes creerlo? Como dice el refrán, uno no sabe lo que tiene, hasta que lo pierde…
Macarena temblaba de rabia, levantando su voz: -¿Estás diciendo que estaba dispuesto a morir por Dafne?
Una enfermera que pasaba por allí la interrumpió, molesta: -Señorita, por favor, esto es un hospital, baje la voz.
El rostro de Macarena pasó de pálido a rojo de la ira.
Empujó con fuerza la puerta de la habitación del hospital: -¡Bruno! ¿Qué significa esto?
Romeo torció la boca, y con ojos llenos de curiosidad miró a escondidas lo que pasaba dentro
de la habitación.
-¡Bang!– la puerta se cerró de golpe.
Al instante, se escucharon fuertes discusiones desde dentro de la habitación.
-¿Aún piensas en Dafne? Bruno, ¿cómo puedes hacerme esto?
Bruno soltó una risa sarcástica: -¿Acaso te debo algo?
Macarena le gritó furiosa: -¿Qué quieres decir?
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Capítulo 160
-Todo lo que hice contigo fue traicionar a Dafne. Ahora lo tengo claro, y ya decidí que no puedo seguir así. Macarena, no vuelvas a buscarme, no quiero que Dafne se sienta mal.
-¡Ja, ja, ja, ja! Bruno, ¿sigues soñando con ella? -Macarena se echó a reír como loca-. ¿Estás preocupado por si Dafne se siente mal? ¿Acaso crees que le importas en lo más mínimo? Estás dispuesto a morir por ella, ¿y ella te ha mostrado interés por lo que te pasó? ¿Ha venido
a verte al menos?
Estas palabras eran como un cuchillo afilado, clavándose profundamente en el corazón de
Bruno.
-¡Fuera de aquí! ¡Lárgate ya! -Bruno le gritó enloquecido, como si perdiera la razón.
Desde la habitación se escuchó el ruido de objetos siendo arrojados contra la pared.
Macarena, viendo a Bruno enloquecido, con los ojos enrojecidos, se burló de él: -Bruno, me das
lástima.
Dicho esto, se dio la vuelta y se fue.
Macarena abrió la puerta y se encontró de repente con la mirada de Romeo, quien aún estaba
allí.
Romeo se rascó la nariz, haciendo como que no escuchó nada: -Eh, olvidé algo dentro, vine a
recogerlo.
Macarena ignoró a Romeo y salió apresuradamente con la cabeza baja.
La puerta de la habitación estaba abierta, y Romeo echó un vistazo adentro.
Todo estaba hecho un desastre en la habitación, de verdad la cosa se puso fea.
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