Capítulo 217
El silencio reinaba en el ambiente, y un teléfono vibrando resonaba con claridad.
Agustín agarró el teléfono y vio que era una llamada de Dafne.
Sus ojos se oscurecieron un poco antes de contestar la llamada con una voz ronca-. ¿Hola,
Dafi?
Al oír la voz ronca de Agustín, Dafne le habló con preocupación-. ¿Qué te pasa, Agustín? ¿Tuviste algún problema de camino a casa?
-No.
Dafne permaneció en silencio por un momento.
Luego le informó-. Ya llegué. No tuve problemas en el camino. Aquí es muy discreto, y la señora que me cuida es muy amable y atenta. Estoy bien aquí.
Solo que no puedo verte, y te extraño mucho… me preocupa tu seguridad.
Eso pensaba decirle Dafne, pero no se lo dijo. No quería ser demasiado sentimental. Ahora no era el momento para hablar de amor con Agustín, él tenía asuntos importantes que atender. Ella solo necesitaba quedarse quieta y seguir sus instrucciones.
Agustín le respondió de manera cohibida- Ok-.
Dafne notó que él estaba particularmente distante hoy. Quizás seguía intentando asimilar lo que pasó durante el camino.
-Entonces… -dudó Dafne antes de continuar-. Voy a colgar para que puedas concentrarte en
tus cosas.
Agustín alzó la vista hacia la luz brillante que entraba por la ventana. Con los ojos enrojecidos y usando todas sus fuerzas, le dijo lentamente-. Dafi, vamos a separarnos.
No había más nada que pensar.
Su abuelo tenía razón, la familia Rosales era gente de negocios legítimos, no podrían sobrevivir a las crueles tácticas de Tristán.
Cuanto más tiempo tardara, más peligro correrían los Rosales.
Dafne se quedó atónita, y aunque movió los labios, no pudo pronunciar palabra alguna, mientras sus lágrimas comenzaban a caer inesperadamente.
Después de un rato, con los labios temblorosos y un sollozo, le preguntó-. ¿Es porque tienes miedo de ponerme en peligro?
-No, simplemente me di cuenta de que mantener esto ya no tiene sentido. Tú…
Agustín respiró hondo, conteniendo las lágrimas, mientras continuaba con dificultad-. Antes pensaba que serías una esposa perfecta. Solo una chica como tú, con belleza, talento y una
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Capitulo 217
buena familia, puede ser digna de ser mi esposa. Pero…
Cerró los ojos, reprimiendo el dolor, y le dijo con amargura-. Pero pensándolo bien, creo que todavía no me he divertido lo suficiente. No quiero estar con una sola mujer toda mi vida. Así que, mejor terminemos. No te culpes, fui yo quien te falló.
La casa de la finca era una pequeña mansión de dos pisos con un jardín.
Desde la ventana de la habitación de Dafne, se podía ver el jardín de abajo.
En esta época del año, el jardín estaba marchito, reflejando el estado de ánimo de su dueña.
Dafne se acurrucó en la cama, abrazando la cobija mientras lloraba en silencio.
Desde que colgó el teléfono, había pasado más de una hora y sus lágrimas no cesaban.
¿Cómo una persona puede derramar tantas lágrimas? Parecía que nunca se acabarían.
No podía creer que Agustín realmente quisiera terminar con ella porque ya lo estaba aburriendo.
Él no era así.
Seguramente era por Tristán.
Agustín no quería que Tristán la lastimara, así que quiso separarse de ella para protegerla.
Pero esas palabras fueron realmente hirientes, y no podía ignorarlas.
No quería llorar, pero no podía controlar las lágrimas.
En los días de invierno, oscurecía temprano y ya eran más de las seis de la tarde cuando la oscuridad se apoderó del cielo.
Unos suaves golpes sonaron en la puerta, y la señora le dijo desde afuera-. Srta. Rosales, es
hora de cenar.
Dafne se sonó la nariz, con su voz un poco ronca-. Señora, no tengo hambre.
Tal vez la mujer no la escuchó, y volvió a golpear la puerta-. Srta. Rosales, ¿está dormida?