Capítulo 62
Floriana parpadeó y dijo: -¿Sabes por qué toqué el timbre de Villa Encanto hoy?
Valentín permaneció en silencio.
Floriana continuó: -Porque en mi corazón, desde el momento en que firmé el acuerdo de divorcio y me fui, Villa Encanto dejó de ser mi hogar. Visitar la casa de otra persona requiere tocar el timbre, es una cuestión básica de cortesía.
Valentín frunció el ceño. -Rafael se pondrá triste si te escucha decir eso.
Floriana sonrió, dejando que la ventisca ocultara el enrojecimiento en sus ojos. -Valentín, eres el abogado estrella que todos respetan y temen. Sabes muy bien cómo manejar a las personas. Valentín mantuvo su expresión seria y no respondió. Para Floriana, su silencio solo significaba que no se molestaba en explicarse. En otro tiempo, eso la habría herido, pero ya no.
Sin embargo, había algunas cosas que, en este momento, era mejor aclarar. -¿Piensas que mi comportamiento de hoy es algo cruel para Rafael?
-Sabes perfectamente que Rafael depende mucho de ti -replicó Valentín, haciendo una pausa antes de continuar-. Tienes un lugar en su corazón que Tati no puede ocupar.
-¿De verdad? -Floriana se rio-. Si sabes que soy tan importante para Rafael, ¿por qué le dices esas cosas? Le enseñas que la sangre no se puede reemplazar, pero también quieres que dependa de mí eternamente.
-Valentín, ¿no te parece que tu manera de educarlo es bastante repugnante?
Valentín se quedó pasmado, luego soltó un suspiro. -Tati y él son madre e hijo biológicos. La depresión de Tati y el hecho de no haber reconocido a Rafael siempre han sido un obstáculo para ella.
-Yo nunca les impedí reunirse como madre e hijo. Ahora que me retiro, es para dejarles espacio a ustedes tres. He sido bastante considerada. ¿Qué más quieres de mí?
Valentín la observó, su mirada era incierta y oscura. Su silencio era, para Floriana, una forma de ignorarla.
-Valentín, no sé cómo ves nuestro matrimonio, pero para mí, incluso sin amor, pensé que éramos una familia que se preocupaba mutuamente. Pero me ocultaste la verdad sobre Rafael y me usaste para criar a tu hijo con Tatiana. Me hiciste sentir como un payaso…
Hablar de esto aún la hacía sentir humillada. Se detuvo, respiró profundamente para calmarse, y luego continuó:
-Sé que nuestro matrimonio desde el principio fue un acuerdo de conveniencia, pero aun así, tenía derecho a saber. Sin embargo, siempre me trataste como a una extraña, o peor aún, pensaste que era una tonta fácil de engañar…
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Capitulo 62
-Nunca te consideré una extraña -Valentín la miró a través de la tormenta de nieve, sus ojos llenos de emociones complejas-. Y sobre la verdad de Rafael, no era mi intención ocultártela,
en ese momento…
-Ya no importa -lo interrumpió Floriana sin darle importancia-. Ahora no me interesa nada relacionado con ustedes dos.
Valentin se sorprendió, incrédulo. -¿Hablas en serio?
-¿Acaso parezco que estoy bromeando? -Floriana soltó una risita sarcástica-. Valentín, ¿no sería mejor mantener la dignidad? Entiendo que quieras proteger a tu hijo y no quieres que Tatiana sufra. Así que, en lugar de manipularme moralmente, deberías ir a cuidar a tu familia.
Dicho esto, se dio la vuelta para abrir la puerta del carro, pero Valentín se adelantó y la sujetó del brazo
Con fuerza, Valentín la atrajo hacia si, haciendo que Floriana chocara contra su pecho. Ella se quedó pasmada y levantó la otra mano para empujarlo, pero él la jaló con más fuerza, colocando una mano sobre su vientre.
Sobre su cabeza, la voz profunda y ronca de Valentín resonó: -¿Estás embarazada?