Capítulo 331
El cumpleaños de la Sra. Frias llegó rápidamente. Gracias al recordatorio de Armando, Josefina se aseguró de preparar un regalo con antelación para la anciana. Cuando bajó a desayunar, lo primero que hizo fue entregarle el regalo a su bisabuela.
La Sra. Frias sonrió con los ojos entrecerrados y le dijo a la niña: “Gracias, Josie.”
Armando también le entregó su regalo a la anciana: “Esto es de parte de Pauli y mía, feliz cumpleaños.”
Al escuchar eso, la Sra. Frias lo miró de reojo.
Antes de que pudiera decir algo, el mayordomo entró con dos cajas de regalo y le dijo a la Sra. Frias: “Señora, esto lo envió la Sra. Romo como presente para usted.”
La Sra. Frias los recibió y luego miró a Armando. Aunque sabía que Armando solo quería hacerla feliz al decir que el regalo de ellos dos, ya no insistía en lo que ocurría entre ellos, en cambio dijo con un tono despectivo: “Nuestra Pauli me preparó un regalo por su cuenta, no hace falta que hagas cosas innecesarias.”
Después de eso, dejó de prestarle atención.
Armando sonrió sin darle importancia y se volvió para apresurar a Josefina a que terminara su desayuno, ya que él la llevaría a la escuela.
Después de haber entregado los regalos, Paulina tomó las llaves del auto y se dirigió a la
empresa.
No mucho después de llegar, fue junto con Jaime a Red Nova. Apenas llegaron, vieron a Mercedez y al verlos, ella solo saludó a Jaime: “Sr. Jaime.”
Mientras saludaba a Jaime, Mercedez sonreía, parecía estar de buen humor y no mostraba ninguna tristeza por no poder asistir al cumpleaños de la Sra. Frias.
Jaime la observó, frunció los labios y no le prestó atención, en cambio se fue a trabajar con Paulina. Jaime pensaba que el que Paulina no asistiera al cumpleaños de la Sra. Frias era una sabia decisión.
Esa noche, regresó a la casa familiar y junto con su padre Lucas Burgos y su madre Andrea, se dirigieron al restaurante donde la Sra. Frias celebraba su fiesta de cumpleaños. Llegaron bastante temprano, así que aún no había muchos invitados en el salón.
Ese era un día importante para la Sra. Frias, y la familia Frias lo tomaba muy en serio. En el salón, casi todos los miembros de la familia Frias, incluida Josefina, estaban presentes.
Jaime no había visto a Josefina en dos o tres años. La última vez que la había visto, pensó que se parecía a Armando, y después de esos años, en aquel momento que la veía de nuevo, encontraba que se parecía aún más a él.
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Capitulo 331
Cuando la familia Burgos llegó, la familia Frias se acercó amablemente a saludar: “Señores, bienvenidos.”
Después de intercambiar algunas palabras, la madre de Jaime, Andrea, posó su mirada en Josefina.
Jaime y Paulina se conocieron después de que Paulina se convirtiera en alumna de Jorge. A Andrea le agradaba mucho Paulina, pensaba que tenía una edad similar a la de Jaime y que era una persona destacada, por lo que deseaba que pudieran ser pareja. Sin embargo, apenas insinuó esa idea, Jaime le dijo que Paulina ya tenía a alguien a quien le gustaba y, antes de que pudiera reaccionar, ya se había casado con esa persona. Andrea sabía algo sobre Paulina y Armando. Por lo tanto, también sabía que Josefina era hija de Paulina.
Al ver a la madre de Jaime, Andrea, mirando a Josefina, la Sra. Frias sonrió y dijo: “Esta es mi bisnieta Josie.”
La madre de Jaime sonrió y acarició la cabeza de Josefina elogiándola: “Es realmente adorable.”
Después de que Josefina saludara obedientemente con un “hola señora“, miró a Jaime y no pudo evitar observarlo un poco más. La Sra. Frias se rio y dijo: “Josie, ¿por qué estás mirando tanto al Sr. Jaime?”
Josefina respondió: “El Sr. Jaime se me hace… muy familiar.”
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