Capítulo 335
Paulina, Jaime y el Sr. Barrera de Red Nova tenían un grupo de chat. Lo que sucedió ese día fue tan impactante que el Sr. Barrera no pudo reprimir su espíritu de chisme y lo compartió con ellos de inmediato. Realmente, ni a Paulina ni a Jaime les interesaba mucho cuántos pretendientes tenía Mercedez o lo locos que estaban por ella.
Por la tarde, cuando escucharon al Sr. Barrera decirles: “La hija del Sr. Armando vino a la empresa a buscar a la directora Mercedez. Antes, la Srta. Mercedez decía que se llevaba muy bien con la hija del Sr. Armando y muchos no lo creíamos. Ahora que vimos a la hija del Sr. Armando, nos dimos cuenta de que realmente le gusta mucho“, Paulina se detuvo bruscamente mientras tecleaba.
No es que le molestara saber que Josefina estaba cerca de Mercedez. Simplemente pensó de repente que si se corría la noticia de que Mercedez y Josefina tenían una buena relación, no podría ocultarselo a su tío y a su abuela. Aunque sabía que tarde o temprano llegaría ese día,
pero…
Jaime, al ver su expresión, adivinó lo que estaba pensando. Se rio con desdén y le dijo: “La presencia de Josefina se difundió rápidamente porque Armando tiene suficiente influencia, pero ¿quién es Mercedez? Ella apenas es una medio súbdita de Armando. Aparte de los empleados de Red Nova y sus pretendientes, ¿a quién le importará cómo se lleva con la hija de Armando?”
Al mencionar eso, Jaime de repente sonrió agregando: “Si los demás supieran que también eres estudiante del profesor, que el diseño de cuap de nuestra empresa y los últimos dos proyectos desarrollados son obra tuya, y que tú eres la verdadera madre biológica de la hija de Armando, entonces sí que sería una noticia explosiva para todo el círculo. En cuanto a Mercedez siendo madrastra… ¡bah!”
Paulina se sentía bastante tranquila. Solo que…
Ella hizo una pausa y dijo: “Mi tío y mi abuela probablemente ya han adivinado que Josefina está cerca de Mercedez.”
Probablemente no preguntaron por miedo a que le doliera más, así que fingían no saber nada.
Jaime también pensaba lo mismo, así que le dio unas palmaditas en el hombro con suavidad para consolarla: “Es bueno que estén preparados. Si no dicen nada, es porque en su corazón, comparado con Josefina, te valoran más a ti. Lo importante es que tú estés bien.”
Paulina sonrió diciéndole: “Sí, lo sé.”
Al hablar de eso, Paulina pensó en el progreso de su divorcio con Armando. Realmente, cuando firmó el acuerdo de divorcio que Armando le dio, pensó que se divorciarían rápidamente, pero no esperaba que se prolongara durante meses. Le había preguntado a Armando muchas veces antes y siempre decía que pronto, pero… Sabiendo que Armando estaba más ansioso que ella por el divorcio, decidió esperar pacientemente su notificación. Sin embargo, en aquel
momento… Pensando en eso, llamó a Valentín para preguntarle sobre el estado del divorcio.
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Valentín, quien le preguntaba cada semana sobre el progreso del divorcio, al escuchar la pregunta de Paulina, le dijo: “Mañana es el día en que hablaré con el abogado de Armando. Te contactaré cuando obtenga una respuesta.”
“De acuerdo.” Dijo Paulina, haciendo una pausa y luego continuó con calma: “Si la respuesta sigue siendo igual de incierta, dile al abogado de allá que estoy dispuesta a irme del matrimonio sin nada. No quiero nada de lo que Armando me dio, y que prepare un nuevo acuerdo de divorcio para que pueda firmarlo lo antes posible.”
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