Capítulo 374
Capítulo 374
Después de hablar con Josefina y colgar el teléfono, Armando le envió a Paulina la hora y dirección de su entrenamiento al día siguiente, pero eso fue todo lo que le proporcionó. No hubo más detalles, ni una sola palabra adicional.
Al día siguiente, Paulina llegó al club de esgrima unos tres o cuatro minutos antes que Josefina. En el auto solo iban Josefina y el conductor. Armando no estaba presente.
Al bajar del auto, Josefina, alegre, tomó de la mano a Paulina y la llevó al interior del club de esgrima. Justo al entrar, Jaime la llamó por teléfono y Paulina le dijo a Josefina: “Voy a atender una llamada.”
Josefina respondió: “Bien, entonces voy a buscar al entrenador.”
“Está bien.”
Jaime solo le preguntó algunas cosas y, tras unas palabras, colgó el teléfono.
Josefina no se había alejado mucho. Su entrenador la vio y la saludó con una sonrisa: “¿Josie, llegaste?”
Después de mirar a su alrededor, preguntó: “¿Hoy no te acompañaron la Srta. Mercedez y el Sr.
Frias?”
“No, hoy vino mi mamá conmigo.”
Paulina escuchó su conversación desde la puerta y, después de unos segundos, entró. El entrenador de Josefina la vio y, sorprendido, dijo: “Señora, ¿usted es…?”
“Mamá.”
El entrenador de Josefina se detuvo y sonrió: “¿Así que usted es la mamá de Josie?”
Paulina asintió y le dio la mano. Durante los últimos seis meses, Josefina había ido a entrenar al club de esgrima acompañada de Armando o de Mercedez, o a veces de ambos.
Él sabía que Mercedez era la novia de Armando, pero no la madre de Josefina.
Josefina iba a aprender esgrima siempre acompañada de su papá o de la novia de este, pero su madre biológica nunca había aparecido. Él pensaba que probablemente los padres de Josefina estaban divorciados o que su madre había fallecido. Con la aparición de Paulina, quedó claro que la madre de Josefina no había fallecido. Eso podía significar que Armando y Paulina estaban divorciados. Sin embargo, las razones del divorcio entre Armando y Paulina eran desconocidas para él. A juzgar por la relación entre Armando, Mercedez y Josefina, parecía que Armando y su actual novia tenían una buena relación, y Josefina también era
cercana a ella.
Él no sabía si la buena relación entre Josefina y Mercedez contaba con la aprobación de Paulina. Dado que no estaba al tanto, decidió no mencionar el tema y en su lugar elogió a Josefina: “Josie tiene mucho interés en la esgrima y es muy talentosa, así que ha aprendido
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Capitulo 374
muy bien. En la competencia del próximo mes, tiene muchas posibilidades de quedar entre las tres primeras.”
Paulina asintió, y antes de que pudiera decir algo, Josefina se acercó, tomó la mano de Paulina y dijo: “Mamá, ¿me acompañas a cambiarme de ropa?”
Paulina asintió.
Después de que Josefina se puso su uniforme de esgrima, el entrenamiento comenzó oficialmente. Se decía que el entrenador de Josefina había sido campeón de esgrima en alguna ocasión, así que su habilidad y técnica no necesitaban presentación. Pero Josefina quizás tenía un verdadero talento, y además de ser muy valiente, en el entrenamiento no mostraba ni un ápice de nerviosismo. Al contrario, sus pasos eran ágiles, su ataque audaz, su defensa rápida, y sus reacciones muy veloces. Entre el ataque y la defensa, ya mostraba una cierta destreza y elegancia.
Por un momento, Paulina casi podía ver cómo sería Josefina en el futuro, creciendo y participando en competiciones. Sin embargo, para entonces, Paulina probablemente no estaría a su lado.
Después de entrenar durante media hora, Josefina corrió hacia ella, agarró su mano y la miró con expectación, preguntándole: “Mamá, ¿lo hice bien?”
Paulina no sabía mucho sobre esgrima y tampoco era una experta en el deporte, pero la noche anterior, había buscado información en línea y adquirió un entendimiento básico sobre el tema. Tomó la pequeña toalla que Josefina le ofreció y, mientras le secaba el sudor, la elogió sinceramente: “Lo hiciste muy bien.”
Luego, se dirigió al entrenador que se acercaba, diciendo: “Gracias por su esfuerzo.”
“Es un placer.” Respondió el entrenador de Josefina, añadiendo: “Sin embargo, el progreso de Josie no es solo gracias a mí. Antes de venir a nuestro club de esgrima, Josie ya tenía una
buena base.”
Armando y Mercedez eran bastante hábiles en esgrima, y se decía que Josefina se interesó en el deporte por su influencia. Para Josefina, ellos eran sus verdaderos maestros de iniciación en la esgrima.
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