Capítulo 717
Cuando Rosana pronunció esas palabras, los estudiantes a su alrededor inhalaron. profundamente por la sorpresa. Aunque todos habían escuchado rumores sobre el tema y notaron que ese día Lourdes, de manera inusual, llevaba pantalones largos para ocultar sus tobillos, nadie se había atrevido a preguntarle. Sin embargo, Rosana no titubeó y mencionó directamente el tema de la tobillera electrónica.
Al escucharla, Lourdes sintió como si su mente explotara y su rostro se tornó rojo de vergüenza, así que furiosa, se lanzó hacia Rosana: “¡Te voy a matar, desgraciada! ¡Campesina!” Rosana apenas se movió, haciendo que Lourdes perdiera el equilibrio y cayera al suelo. Al caer, la tobillera quedó expuesta a la vista de todos. Muchos compañeros lo vieron e incluso algunos sacaron discretamente sus teléfonos para tomarle fotos.
Rosana comentó: “Así que si estás usando una tobillera electrónica, ese es un ‘lujo‘ que no podría permitirme, pero parece que te queda bien.”
“¡Rosana, te voy a matar! ¡Te haré pagar!” Lourdes rápidamente cubrió la tobillera con su pantalón y lanzó una mirada feroz a su alrededor: “¿Qué miran? Cuidado, o les sacaré los ojos y no podrán seguir estudiando aquí.”
Los estudiantes bajaron la cabeza, temerosos de ser el próximo objetivo de esa chica tan temperamental.
Rosana dijo con calma: “Lourdes, parece que nunca aprendes la lección, pero recuerda que si vuelves a hacer algo ilegal, lo único que te espera es la cárcel.”
Con los ojos llenos de rabia, Lourdes respondió: “Si es así, te llevaré conmigo al infierno.”
“Entonces también arrastraré a toda tu familia y nos iremos todos juntos.” Rosana la miró al decir: “¿Sabes cómo tu madre vino a buscarme para negociar una reconciliación?”
Lourdes se puso roja de ira, no obstante, Rosana no le dio más importancia y se marchó.
Marina, caminando a su lado, comentó: “Esa Lourdes está loca. Comparada con su hermana Keira, que es la primera dama de la sociedad, parecen provenir de mundos diferentes.”
“En esencia, son iguales, pero Keira es más astuta y Lourdes está malcriada.”
Rosana no cedió en ningún momento, aunque la familia Montes también había hecho sus movimientos y al final Lourdes no fue encarcelada, solo le pusieron una tobillera electrónica. Pero para alguien como Lourdes, ese tipo de humillación pública era peor que la muerte.
Al salir del edificio, Rosana vio a Melvin esperando afuera, por lo que intentó ignorarlo y seguir su camino, pero él claramente la estaba esperando.
Se acercó a Rosana y le dijo: “Quiero hablar contigo a solas.”
“No nos conocemos lo suficiente como para necesitar una conversación privada.” Rosana no
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quería perder el tiempo con Melvin. Pero él insistió, y ella finalmente le preguntó: “¿Qué quieres decirme?”
“Quiero saber cómo está Leonor.”
“¿No has visto las noticias?” Rosana observó el rostro abatido de Melvin y se preguntó si realmente seguía interesado en Leonor.
Él levantó la mirada: “He estado encerrado en casa estos días, y apenas logré volver a la escuela. Mi madre casi me rompe la pierna por el asunto de Leonor.”
“Puedes ver las noticias, en especial las relacionadas con el proyecto de inteligencia artificial del Grupo Lines. Después de eso, no me harás preguntas tontas.”
Rosana había pensado que Melvin era solo un tipo superficial, pero ¿realmente estaba
interesado en Leonor?
Él rápidamente buscó en su teléfono y su rostro cambió drásticamente: “No puede ser, esto no es posible, seguro que la familia Lines la obligó a hacer eso, ¿verdad? ¡Leonor me dijo que solo me amaba a mí! ¿Cómo podría estar con Benito y además planear casarse?”
Rosana mostró una expresión burlona: “Si tanto amas a Leonor, ¿por qué en la fiesta de Sara te hiciste el desentendido y huiste?”
Melvin mostró una expresión algo incómoda: “En ese momento estaba muy enojado, pensé que realmente me estaba engañando, pero ella me explicó que fue porque ustedes, los hermanos Lines la estaba presionando.”
Durante el tiempo que estuvo encerrado, su madre respondió los mensajes de Leonor por él, sugiriendo la ruptura, ahora Leonor lo había bloqueado y ni siquiera había vuelto a la escuela.
Rosana despreciaba bastante a Melvin por ser un niño mimado, sin ninguna responsabilidad ni compromiso.
“No digas tonterías, yo no tengo nada que ver con la familia Lines.”
